Con el grabado láser, el material se calienta por medio de un haz de láser, no permite el marcaje a color, de modo que el color final lo determina el fondo del material utilizado para grabar. El resultado alcanzado es permanente y muy resistente a la abrasión.
Mediante esta técnica logramos grabar gran cantidad de materiales, dando además un acabado que destaca por su calidad y definición como objetos publicitarios, códigos y placas industriales, maquetas, textil, rotulación…